Boletín Julio 2021
Reto 21 días frente al espejo
Hace tres semanas iniciamos el reto “Frente al espejo”, sencillos ejercicios que nos permitieron hablarnos, mirarnos, reflexionar ante nuestra propia imagen. Los espejos nos acompañan en la casa, en el carro, en los ascensores… en nuestra cotidianidad, por lo que son una herramienta ideal para encontrarnos con nosotros mismos y decirnos frases positivas que nos permitan cambiar los pensamientos negativos que muchas veces nos acechan.
Dejar lo que nos oprime. Cambiar el discurso, el monólogo interior, los complejos y las creencias impuestas es un gran paso para transformarnos y construir una nueva historia. Amarnos con gratitud y respeto, abrazando nuestro niño interior, dejando atrás todo lo que no nos deja crecer. Fueron ejercicios cortos, prácticas sencillas que podemos repetir durante el día para mirarnos directamente a los ojos y conectarnos con los sentimientos, emociones y recuerdos que nos hacen mejores personas.
Te preguntarás por qué 21 días. No es un número escogido al azar, hay una base científica que lo sustenta. La especialista en Programación Neurolingüística (PNL) Martha Ramírez explica que los seres humanos sí podemos cambiar hábitos en nuestra vida. “Cuando yo trabajo durante 21 días sobre algo que quiero cambiar en mí logro hacerlo porque cada 21 días regeneramos células y las células nuevas vienen grabadas con la información adquirida”, menciona. “Si todos los días me despierto y hago un ejercicio tan sencillo como mirarme al espejo y decirme a mí misma que me amo y me acepto como soy, mi mente terminará por creerlo, porque la parte inconsciente lo manda a la consciente”, agrega la experta. El solo repetir la frase crea una destreza y una habilidad para el cambio.
SANTA PACIENCIA
En otras oportunidades te he comentado que las mujeres son el centro y el tema principal de mi trabajo. Creo firmemente que es necesario reconocernos y encontrarnos desde la visión de nosotras mismas y desde la intuición de trabajar unidas por un objetivo común.
De eso, justamente, trata mi obra “Santa Paciencia”, un collage analógico realizado el año pasado como parte de mis reflexiones y cuestionamientos sobre lo mucho que como mujeres hemos alcanzado.
Estoy convencida de que detrás de cada derecho hay un esfuerzo, una necesidad. La historia nos ha enseñado que los logros de las mujeres son motivo de alegría en medio de un ambiente hostil y un mundo que ha intentado relegarnos una y otra vez, dejarnos en el anonimato, o simplemente no nos ha escuchado o valorado lo suficiente. Sin embargo, nos hemos sobrepuesto y, lejos de victimizarnos, hemos explorado rutas, construido vías y abierto nuestros propios caminos.
Nuevas secciones para seguir conectados
Me encanta experimentar, atreverme, probar diferentes formas y maneras de acercarnos, por eso además de nuestras acostumbradas conversaciones a través de IG Live, he incorporado a mi cuenta nuevas secciones que nos permitirán compartir más contenidos.
Una de esas secciones es “Cuentos que inspiran”, un espacio para leer relatos que nos dejan valiosas enseñanzas, que desde la sencillez estimulan nuestra imaginación y nos invitan a reflexionar.
También hay entrevistas cortas a varias personas sobre un mismo tema. Bajo el formato de “5 preguntas”, estamos conociendo anécdotas, sueños, experiencias de mujeres, artistas, abuelas que nos cuentan sus vivencias y suman a nuestra comunidad.
Próximamente te contaré de otros espacios y propuestas para que sigamos conectados, creciendo juntos, tejiendo puentes, soñando en grande.
He aprendido a arriesgarme a hacer cosas nuevas. El crecimiento y la comodidad no pueden coexistir.
Virginia Rometty